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La posibilidad de presentar al mercado un paquete de promociones de los productos o servicios que ofrecen las compañías, siempre ha sido una alternativa que pasa por la mente de todos los gerentes comerciales. Estas pueden ser de diferente tipo y deben ser usadas en momentos específicos del ciclo de vida de los productos o de los canales de comercialización, pues tendrán respuestas distintas por parte de los compradores en función de las circunstancias en las que se ofrezcan a los clientes.

Algunas promociones:

Es importante considerar el momento y las razones por las que se implementan este tipo de acciones, dado que si se llevan a cabo de manera errada o a destiempo, pueden confundir al comprador y traer consigo un desperdicio de recursos. El comprador debe entender que la acción promocional responde a un hecho o evento de celebración o a la búsqueda de una respuesta de asociación marca-comprador y no solo al interés de que el producto sea adquirido de manera puntual porque si esta última es la razón implícita de la implementación de la actividad, el cliente verá su compra solo como un hecho de oportunidad y no como parte de una relación sólida con lazos en el futuro.

Fuente: Revista LatinPyme